domingo, 6 de septiembre de 2009

It's Toon time, baby...
Los dibujos animados son la neta del planeta.
Desde siempre me han acompañado y me han nutrido el coco.
El inconmensurable panteón de personajes que ha hecho mundialmente famosas a la mayoría de las series televisivas- Porky, Daffy Duck, The Roadrunner, Birdman, Galaxy Trio, Mightor, Young Samson, Here Comes The Grump, Ren and Stimpy, Superfriends, The Pink Panther, Shazzan, Bugs Bunny, Moby Dick, Marine Boy, Triton, Scooby Doo, The simpsons, The Lone Ranger, Adventures of Young Gulliver, Valley of the Dinosaurs, Thunderbolts, Space Ghost, Space Angel, Jonny Quest, Clutch Cargo..ufff- ha sido desde siempre mi natural abrevadero, el eje de mi esfera imaginativa.
Muchos de los rasgos de mi inspiración creativa provienen precisamente de todos ellos y, por qué no decirlo, buena parte de lo que hago en la actualidad se originó bajo su influencia.





























Su magia me ha resultado siempre y por demás inspiradora.
Crear la ilusión de vida y de movimiento, de espacio y de tiempo, de anatomía inverosímil y de historias a todas luces insólitas, a partir unicamente de simples trazos de lápiz, son algunas de las cosas que hasta la fecha me siguen cautivando.

La mayoría de los títulos que recuerdo de mi infancia han quedado ya en el baúl de la nostalgia.
Muchos de ellos- ahora se los llama Retro toons- han cedido el paso a series nuevas que poco o nada tienen que ver con la calidad de antaño.
Pese a contar con una auténtica evolución en cuanto a las técnicas y a los equipos de animación dígital, algunas series de la actualidad son sosas y demasiado absurdas, simplonas por decir lo más.
Pareciera de pronto que han renunciado a los elementos básicos que dieron vida a la industria: buenos argumentos y carismáticos personajes.








Habrá algunos que en la actualidad puedan rescatarse quizá por su hilarante creatividad, por su originalidad o bien por su explosiva acidez para cautivar al espectador, pero los buenos tiempos de los dibujos animados, me parece, ya pasaron-Sniff-.
Como un diminuto homenaje por todas aquellas inolvidables tardes de mi infancia cuando los sintonizaba en la T.V. y por todo cuanto aportaron a mi imaginación - desvirtuando de paso también mi conciencia, claro- me atreví a ponerle garabatos a unas lineas de texto que tenía como apuntes de una historia.
¿ El resultado? Una solitaria página para El Chamuco en su edición número 182 bajo esta premisa, bajo el rubro toon .
Como tal se publicó y el ejemplar empezó a circular a partir de hoy en los quioscos de revistas.
Tardíamente lo confieso: los dibujos animados de mi infancia me marcaron para toda la vida.
Quizá por eso hago comics.
Porque a final de cuentas, los comics no son otra cosa que dibujos animados en estático y a contramano, los dibujos animados son comics...en movimiento.

jueves, 3 de septiembre de 2009

La peste...

Nos abarrotaron hasta la náusea con su versión de la clase y el tipo de país que necesitamos, nos inflamaron el lóbulo izquierdo del cerebro de la cabeza con su burlona publicidad..nos saturaron con negros avisos de hecatombes socioeconómicas si los buenos gallos no ganaban, nos colmaron el plato con promesas contrarias a toda lógica, con entelequias, con un dedo nos enatolaron con mentiras manoseadas una y otra vez, con poses y con miles y miles de sonrisas baratas. Lo peor del caso es que todo ese circo mediático lo terminamos pagando eternamente los ciudadanos de este país y, más grave aún, lo pagamos con los impuestos que se nos cobra por tener la manía de trabajar. Con todo, este ciclo se repite de cuando en cuando y el mensaje implícito pareciera ser una y otra vez el de que todo cambie para que todo siga igual ...Lamentablemente la maquinaria de la manipulación político-propagandística funcionará siempre a la perfección -Sniff-... y siempre estará ahí, perfectamente lubricada, para cuando se la requiera. Para desenmascararlas, para decirnos lo que se esconde tras de las campañas políticas, ¿ quién mejor que un super -antihéroe?. Para ello y en este caso ...El capitán Gangrena...En el Chamuco edición número 177 nos enteramos de su puño y letra, de algo que los seres libres sospechaban desde un principio...