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La más dulce de mis chicas...

Regresa la hermosísima y Dulce Pilette a las páginas del Chamuco y con ella, una crítica un tanto cuanto blandengue sobre los maestros , uno de los oficios más nobles del mundo,
pero tan pesimamente desempeñado las más de las veces por algunos de sus oficiantes en nuestro país.
La bruja Moira se engalana una vez más con uno de sus filtros mágicos y al final, la cosa no le resulta como lo había planeado. Como siempre...
Siguiendo la premisa de la saga, el misterioso ángel de la guarda de la chica sigue trabajando en silencio : Por eso todo lo que hace o deshace Pilette termina siempre en el mejor de los desenlaces y en las mejores manos, aunque de momento no lo parezca...


Así ocurre con muchas de las cosas más importantes de la vidorria...
¿ No os lo parece?
La portada de esta semana lleva el número 176 en los dorsales y el ejemplar ya está a la venta.
Y sin ánimos ningunos de ofender, una advertencia para algunos maestros: Sí pueden entender su contenido ; la revista trae monitos y viene en español.